lunes, 31 de mayo de 2010

Serpentín para locos



Viajar por tierra da cansancio, da sed y adrenalina. Lo más emocionante es que uno puede ver el camino zigzagueante que conduce el bus hacia un determinado destino.
Asimismo, uno es capaz de ver carteles que indican ciertas distancias en kilómetros y el nombre de ciertas ciudades. Lo cual nos hace pensar que la geografía plasmada en los mapas tiene parte de realidad y parte de ficción, pues uno es incapaz de observar las curvas que determinan los países en un viaje por bus. Más bien, uno piensa que el planeta es una gran hilera de medida finita y que el concepto de que la tierra es redonda, solo es una metáfora.
Un viaje por bus, nos permite saber que existen fronteras mas no líneas con cierta forma, ya que las curvas dibujadas en el mapa, solo determinan que ellas son nada más que un serpentín para locos.