El día de hoy, Hascalana Quilefán se llevó una gran sorpresa. En uno de los recovecos de su guarida encontró unos cuadernos de colores, algo empolvados. Uno de ellos decía: "Creaciones vocales y composiciones musicales". Apenas lo abrió, su vista se tropezó con unas cuantas frases de canciones que ella las compuso cuando tenía trece años. Se sorprendió mucho, pues pensaba que aquellos folios habían sido rotos o enviados a algún basural. Mientras pasaba las páginas, recordó su época artística de inocencia y plenitud, en la cual sentía que no estaba en obligación de cumplir labores curriculares ni domésticas. Ella sabe que esos momentos jamás volverán, pues ahora se ve inmersa en un mundo adulto, en el que la satisfacción vital pasa a un segundo plano.
Asimismo, halló unos pentagramas arrugados. Apenas los vio, pudo recordar que, en algún momento de su etapa escolar, tuvo que memorizar las notas musicales para luego tocarlas en la flauta dulce. Estos son algunos de los tantos recuerdos musicales que Hascalana tiene y ella los piensa conservar para siempre.
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